viernes, 17 de mayo de 2013

La Justicia avanza sobre Puricelli por las licitaciones antárticas


La Justicia avanza sobre Puricelli por las licitaciones antárticas

El juez federal Luis Rodríguez pidió al Ministerio de Defensa el envío de documentos sobre el millonario alquiler de un barco y de dos helicópteros

La campaña antártica 2013 acaba de fracasar por no poder completarse el abastecimiento de las bases argentinas, pese a las reiteradas desmentidas del Gobierno a las informaciones que preanunciaban ese desenlace. Y ahora el ministro de Defensa, Arturo Puricelli, es investigado por el juez federal Luis Rodríguez por las irregularidades denunciadas por el diputado nacional Manuel Garrido, ex fiscal anticorrupción.
A Marambio, la principal unidad en la Antártida, sólo llegó el 60% del combustible, debido a los múltiples problemas que tuvieron el barco y el helicóptero contratados por Defensa tras un pago anticipado de 15,8 millones de dólares.

Fuentes judiciales confirmaron ayer que el magistrado solicitó una serie de medidas para obtener documentación a pedido del fiscal Ramiro González, que imputó al ministro de Defensa y a su hijo Alejandro; al secretario de Planeamiento, Carlos Vega; al director general del Servicio Logístico de la Defensa, Carlos Lugones, y a varios militares por presuntas irregularidades en las dos licitaciones que ganó la empresa Transport&Service.

Entre los documentos que busca el juez figuran datos que refieren a discrepancias entre lo previsto en la licitación y el material que empezó a operar el 17 de febrero pasado. En el folio 1445 del expediente de licitación aparece la adjudicación decidida por la Dirección del Servicio Logístico de la Defensa en favor de Transport&Service. Se especifica la contratación por 2 millones de dólares de dos helicópteros pesados. Sólo llegó uno y no se conoce el motivo de esa falta.

El ministro Puricelli se mantuvo ayer en silencio y hoy se presentará en el acto por el Día de la Armada.
Numerosos e insólitos problemas tuvieron el barco holandés contratado, el Timca, y el helicóptero ruso subcontratado a una compañía sudafricana. Las fallas más graves llegaron por la rotura de una turbina de la aeronave (20 días fuera de servicio), la falta de combustible que mantuvo al buque por dos semanas en Ushuaia, una rotura de motor que redujo su capacidad tanto en la base San Martín como en Esperanza y la incapacidad del Timca para enfrentar el hielo de la zona.

Se sumaron varios problemas, incluso con discusiones económicas sobre el pago de días adicionales de trabajo, cuyo monto es fijado en el contrato a más de 100.000 dólares por jornada extra, que llevaron al abrupto final de la misión al volverse extremas las condiciones climáticas. Se planificó un puente aéreo para llevar combustible a Marambio, que agotaría sus actuales provisiones de energía en septiembre (de lo que se informa por separado).

Fuentes militares de alto nivel mostraron ayer su preocupación por el gran esfuerzo del personal logístico, que quedó anulado por el contrapeso de los medios con los que tuvieron que operar en la Antártida. En el análisis de esos militares de alto rango la responsabilidad principal por el fracaso de la campaña antártica recae en las malas condiciones del helicóptero contratado, que dejó de trabajar durante 20 de los primeros 33 días de actividad, momento clave para evitar el peor clima y el hielo cerrado de estos días.

Ese problema podría haberse evitado con la presencia de una segunda aeronave. Y el documento oficial determina directamente que se contrataron dos helicópteros pesados, incluso en el convenio comercial por el alquiler del barco se especifica que éste debe contar con "capacidad para embarcar, transportar y operar dos helicópteros pesados tipo Kamov32 o similar". No hay explicaciones sobre por qué llegó un helicóptero pese a haberse pagado por anticipado por dos.

Otro documento importante es la circular aclaratoria N° 2, firmada por Lugones el 29 de agosto de 2012, en la cual se detallaron las condiciones que debía tener el barco para trasladar a los helicópteros. A pedido de la empresa Trade Baires International (que luego impugnó la licitación y presentó denuncias en la Oficina Anticorrupción), el funcionario hoy investigado informó en el inciso C de su respuesta 3 que "por capacidad de operar debe entenderse que el buque deberá disponer de una cubierta de vuelo y de un sitio distinto a ésta para acondicionar y mantener los helicópteros".

En noviembre pasado la empresa Trade Baires International había advertido sobre la incapacidad del Timca para operar con aeronaves, debido a que no contaba con el permiso ni la experiencia. El juez Rodríguez solicitó a la Oficina Anticorrupción la nota presentada por la apoderada de esa compañía, Marina Bertino. En esa documentación el magistrado leerá, entre otras impugnaciones presentadas por la empresa que había ganado las licitaciones antárticas desde 2007, que "el buque no tiene ninguna experiencia en la Antártida y no tiene ninguna habilitación ni espacio para poder operar con los helicópteros". Y agregó una crítica sobre la "negligencia" de los funcionarios al no tomar en cuenta que los planos de la bodega presentaban una altura de 4,75m y el Kamov alcanza 5,20m. "Sencillamente, no pueden entrar", se aseguró en esa denuncia.


Las imágenes que pudo observar LA NACION mostraron al helicóptero anclado en cubierta, incluso en momentos de su reparación de turbina, y cerca de los barriles con combustibles, en una pista que especialistas militares navales y aéreos señalaron como improvisada.

Ese buque esperaba ayer otra reparación y ya recibió la orden de abandonar la zona antártica y poner proa a Ushuaia. Para el Timca se acabó la campaña antártica, pero su mención empezará a circular por los tribunales federales, donde el fiscal González espera que Puricelli pueda dar explicaciones sobre la sucesión de anormalidades señaladas en esta frustrada campaña.

Piden que el ministro "se vaya por inepto"

El diputado nacional Julio Martínez (UCR) reclamó ayer la renuncia del ministro de Defensa, Arturo Puricelli, por "inepto" y por estar bajo "sospechas de presuntos actos de corrupción", debido al fracaso de la campaña antártica, que no pudo ser completada por las fallas que registró el buque holandés polar contratado por el Gobierno.

"Al ministro ya no le pedimos más que venga al Congreso. Hoy le pido la renuncia por inepto y sospechas de presuntos actos de corrupción", declaró el legislador, al recordar los sucesivos traspiés generados en el área de Defensa..

http://www.lanacion.com.ar/

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